Morelia, Michoacán.- Con la decisión tomada por la presidencia de la República, encabezada por Andrés Manuel López Obrador, el Estado Mexicano se hincó ante la delincuencia organizada, afirmó el diputado ciudadano Javier Paredes Andrade.
El politólogo opinó que es una burla para la ciudadanía y una gran derrota la estrategia de pasividad emprendida por el gobierno Federal para el combate de la delincuencia organizada y los sucesos registrados en Culiacán, Sinaloa, sentarán un precedente negativo para la nación.
El diputado único por Movimiento Ciudadano, lamentó que México se encuentre en manos de la delincuencia común y organizada y carezca de un gobernante, con la capacidad, fuerza, entereza e inteligencia suficiente para poner un alto a la delincuencia, que ha dejado miles de muertos en el país y la cual a avanza diariamente a paso agigantados, mientras el gobierno retrocede y cede a sus caprichos y dominios.
Paredes Andrade declaró que “no podemos estar a merced de delincuentes, las acciones en Culiacán dejan en evidencia, que no existen acciones de inteligencia para la detención de narcotraficantes, pero tampoco una estrategia clara, enérgica y dura para combatir a los delincuentes”.
Recalcó que la decisión de López Obrador de dejar en libertad al hijo de unos de los narcotraficantes de México, fue una derrota ante los ojos de los mexicanos que viven en el terror provocado por las mafias y una vergüenza ante el mundo.
Añadió que “aunado al ridículo estratégico en materia de seguridad, se suma el pésimo desempeño en comunicación por parte de su gabinete, ya que primero salió el propio abogado de la familia Guzmán Loera a informar al pueblo de México, que el narcotraficante había sido liberado, mientras el gobierno mexicano permanecía en silencio total, mientras el país entero esperaba una respuesta por parte de sus autoridades”.