El líder de la banda de música Foo Fighters, Dave Grohl, ha vuelto a caerse del escenario. Esta vez fue durante el primer concierto de la banda en 2019, celebrado en el The Joint at Hard Rock Hotel de Las Vegas.
Como es habitual, Grohl se pasea por el escenario mientras toca la guitarra y llega hasta uno de los extremos, donde un fan le pasa una lata de cerveza como gesto de camaradería.
El músico la coloca sobre un amplificador y trata de bebérsela sin usar las manos, pero sin querer la tira. Después de un segundo la toma con las manos y se la bebe de un solo trago.
Cuando Grohl se gira para volver al centro del escenario termina cayéndose de espaldas ante el estupor generalizado de los asistentes.
La situación no va a mayores en esta ocasión y queda más como una anécdota que como otra cosa, pero cabe recordar que en 2015 sí tuvo un accidente mucho más serio durante un recital en Estocolmo.
Allí se cayó de un escenario más grande y alto, por lo que el costalazo fue mucho mayor, con tan mala fortuna, además, de que se rompió la pierna en la caída.
A pesar del grabe incidente, el músico terminó con el concierto y cumplió con la gira sin que dicho percance causara un problema mayor de salud.