Morelia, Michoacán.- Para cambiar la realidad de la educación es fundamental cumplir con diversos compromisos. Michoacán requiere recursos y para ello hay que exigir un nuevo federalismo educativo; el Congreso Federal debería elaborar una nueva Ley de Coordinación Fiscal; se requiere concretar la federalización de la nómina y hay que orientar un modelo educativo innovador, sentenció Eduardo Orihuela Estefan.
Tras reconocer la labor y la importancia de los maestros del país y especialmente de los de Michoacán, el coordinador de los diputados del Partido Revolucionario Institucional en el Congreso del Estado, dijo que la educación en Michoacán requiere recursos, así que para financiar una educación de excelencia hay que exhortar y exigir un nuevo federalismo educativo.
Que el Congreso Federal elabore una nueva Ley de Coordinación Fiscal que otorgue fondos suficientes, y que considere la creación de un Fondo Federal para la Educación Superior; y presupuestos plurianuales para infraestructura.
Además, se requiere concretar la federalización del pago de la nómina, para darle un respiro a las finanzas estatales y redireccionar recursos a áreas que más lo necesitan y se debe orientar un modelo educativo innovador, una política pública educativa que traiga buenos resultados a los estudiantes michoacanos.
“Hoy requerimos un modelo educativo que incluya técnicas de enseñanza y aprendizaje efectivas, que garantice el aprendizaje en los alumnos y la facilidad para que los profesores enseñen sus conocimientos”
Orihuela Estefan indicó que con la votación que se dio esta madrugada, el régimen político que viene llegando, ahora tiene la Reforma Educativa que desea. “Quieren crear un elefante fuerte y poderoso; ese elefante es la educación que puede garantizar que México despegue, espero que no se convierta en un elefante reumático”.
El priista sentenció que el reto de la educación en el estado es abrumador, ya que tenemos uno de los menores grados de escolaridad a nivel nacional, apenas segundo de secundaria; nuestra calificación es de 3.8 sobre 10, según el Índice de Cumplimiento de la Responsabilidad Educativa Estatal.
Aunado a lo anterior, refirió, tenemos el mayor índice de deserción escolar, pues 7 de cada 10 niños de 3 años se quedan fuera de la educación preescolar y la calidad de la infraestructura también deja mucho que desear. Según el Inegi, cuatro mil centros de educación básica no cumplen con los requerimientos mínimos para ser considerados como escuelas y sólo 2 de cada 10 centros cuentan con rampas para personas en condición de discapacidad.
Por lo anterior, Eduardo Orihuela consideró que se debe hacer frente a la realidad y es que hoy los niños y jóvenes en Michoacán no tienen la educación ni las herramientas para asegurar su futuro.
Finalmente, destacó que la reforma aprobada contiene los elementos fundamentales de la del 2013; se mantienen los principios de la educación, se garantiza el concepto de inclusión, se prioriza el interés superior de niñas, niños, adolescentes y jóvenes, y se reconoce a los docentes como agentes de transformación en el proceso educativo.
“Hoy trabajamos por el Michoacán que queremos, un Michoacán que nos haga sentir orgullosos”. #EsTiempoDeEscuchar