Morelia, Michoacán.- Los recientes crímenes de odio que se han registrado en Estados Unidos demandan unidad de los mexicanos, y desde el Congreso de la Unión hasta la presidencia de la república deben asumir una postura de defensa de las garantías de la comunidad migrante, expresó Luis Manuel Antúnez Oviedo, Delegado Nacional de Movimiento Ciudadano.
México debe exigir respeto a otras naciones y a sus mandatarios hacia la comunidad migrante, pero de manera paralela y congruente también debe garantizar el respeto a los derechos humanos de los migrantes que pasan por nuestro país, explicó.
Los crímenes de odio son alimentados por las posturas de sus liderazgos políticos, por ello el gobierno mexicano debe dejar de lado las tibiezas y los dobles discursos y exigir al gobierno estadounidense que se conduzca con responsabilidad y sensibilidad, fuera de intereses político electorales, para no propiciar ni provocar hechos tan lamentables como los suscitados recientemente en el vecino país del norte, apuntó Antúnez Oviedo.
El Delegado Nacional de Movimiento Ciudadano dijo que desde la campaña electoral de Donald Trump para llegar a la presidencia de Estados Unidos advertimos un preocupante aumento de crímenes de odio por razones de nacionalidad, donde el blanco de los discursos éramos los mexicanos; y este discurso no disminuyó sino aumentó de tono ahora que busca la reelección.
Ante esto el gobierno mexicano tiene la alta responsabilidad de, si bien no interferir en la vida política ni en la soberanía de otras naciones, exigir respeto a los derechos humanos de los migrantes y que no alimenten con odio a sus pueblos que deriven en violencia y crímenes.
Por ahora el gobierno de la república sólo ha atendido lo relativo al suceso del fin de semana pasado, pero no ha asumido una postura firme respecto al discurso y narrativa de la política emprendida contra la comunidad migrante, especialmente los mexicanos.
De manera adicional, en Movimiento Ciudadano remarcamos que es momento que el gobierno de México replantee con firmeza ante el gobierno de Estados Unidos la política de compra de armas.
Este tipo de acontecimientos deben llevar tanto al gobierno mexicano como al estadounidense a crear y fortalecer una permanente cooperación, y en esto el gobierno de nuestro país tiene la responsabilidad de que ser un impulsor firme ante la comunidad internacional, destacó Antúnez Oviedo.