Lynwood, California.- Como parte del compromiso de acompañar y compartir la alegría de volver a ver a sus seres queridos, la mañana de este viernes el gobernador del estado Silvano Aureoles Conejo vivió, junto a decenas de familias, originarias de Villa Jiménez, la emoción y alegría de volver a ver a sus seres queridos.
“Tengo mucha familia migrante y comparto ese deseo de ver y compartir con los familiares, casi todos tenemos por lo menos a un familiar en Estados Unidos, somos un estado binacional y con Palomas Mensajeras queda demostrado y consolidado”, puntualizó el mandatario estatal.
En la Casa Michoacán, ubicada dentro de la Plaza México, el mandatario estatal reconoció el esfuerzo y solidaridad del grupo de voluntarios que hace realidad los momentos invaluables que viven los paisanos michoacanos cuando se reencuentran con sus hijos, hijas, nietas y nietos, y en algunos casos, hasta bisnietos.
“Entre todos estamos sobre poniéndonos a los retos y dificultades que tenemos, juntos y juntas podremos salir adelante, los michoacanos somos gente buena y trabajadora, somos un estado lleno de cultura y tradiciones, gente fuerte y cariñosa”, acotó Aureoles Conejo.
En el grupo de Villa Jiménez, viajó Don Arturo Valencia Ramos, de 78 años de edad, quien desde hace 28 años no veía a sus hija Lourdes, quien trabaja como camarera de un hotel en California.
Su hija sigue siendo la misma, una mujer muy trabajadora, consideró Don Arturo, quien quería verla para abrazarla y decirle que la quiere mucho.
Así como la historia de Don Arturo, miles de Palomas Mensajeras han cumplido su sueño de volver a ver a sus seres queridos, por lo que el mandatario estatal refrendó su compromiso de continuar el trabajo para que más michoacanas y michoacanos se reencuentren con sus familiares radicados en Estados Unidos.
