La Fiscalía General de la República señala al expresidente de México Enrique Peña Nieto (2012-2018) de ser, presuntamente, el máximo responsable de un grupo criminal que participó en delitos de cohecho, traición a la patria y otros de índole electoral, en el conocido caso vinculado a la constructora brasileña Odebrecht.
El señalamiento contra Peña Nieto fue incluido en la solicitud de orden de aprehensión contra su excanciller y exsecretario de Hacienda Luis Videgaray, de acuerdo con una copia del expediente obtenida, que fue publicada por el periódico Reforma.
Videgaray es acusado de presuntamente haber ordenado el pago de sobornos millonarios con dinero recibido de Odebrecht, a cambio de contratos. Sin embargo, en el documento se menciona que el exfuncionario actuó bajo instrucciones de su jefe, en alusión a Peña Nieto, por lo que se considera al exmandatario como «autor mediato» de los delitos mencionados.
Según la orden de aprehensión contra Videgaray, por órdenes de Peña Nieto, el exfuncionario habría distribuido 121 millones 500.000 pesos (5,9 millones de dólares) en sobornos entregados a legisladores del Partido Acción Nacional (PAN), Ernesto Cordero y Jorge Luis Lavalle, así como al dirigente de la tolda política, Ricardo Anaya, y al entonces senador del Partido Revolucionario Institucional (PRI), David Penchyna Grub.
«Su propio aparato de poder criminal»
«Se concluye que Enrique Peña Nieto jugó un papel central en la comisión de delitos de cohecho, traición a la patria y delito electoral, lo cual puede asumirse sobre la base de proposiciones empíricas generales», señala un fragmento del expediente.
En este sentido, la Fiscalía afirma que Peña Nieto «contaba con su propio aparato de poder criminal, con cuya ayuda implementó una estrategia de cooptación de la voluntad de los legisladores encargados de la aprobación de sus reformas estructurales en materia energética, mediante la obtención de dinero principalmente por parte de Odebrecht».
El documento señala que los delitos de cohecho y traición a la patria requirieron de considerables recursos logísticos y financieros, para realizar gestiones de los sobornos de la constructora brasileña tanto en México como en el extranjero.
Las acusaciones contra el expresidente mexicano y quien fuera su mano derecha se desprenden de las investigaciones por el caso de sobornos millonarios otorgados por la constructora brasileña Odebrecht, a raíz de la denuncia de hechos presentada por el exdirector de Petróleos Mexicanos, Emilio Lozoya, quien acusó a sus excolaboradores luego de ser aprehendido en España y extraditado a México.
El caso Odebrecht es el mayor caso de corrupción política en México debido a los personajes de alto perfil que se han visto involucrados en una red de sobornos utilizada para aprobar reformas y promover campañas políticas.
Con información de Actualidad