Morelia, Michoacán; a 24 de noviembre de 2020.- «La votación de ayer en el Congreso del Estado no sólo definió una irresponsable contratación de deuda pública para Michoacán, volvió a ratificar la existencia de dos visiones para el país y para el estado y dejó en claro la solidez de las alianzas y la existencia de posturas ‘bisagra’ dentro de ese debate», señalaron las diputadas y diputados morenistas, para quienes el gobierno actual está actuando irresponsablemente al dejar una administración comprometida financieramente a los próximos cuatro gobiernos.
El texto firmado por los legisladores Cristina Portillo Ayala, Osiel Equihua Equihua, Sandra Luz Valencia, Alfredo Ramírez Bedolla, Antonio Madriz Estrada y Zenaida Salvador Brígido, apunta que «el gobierno y sus aliados dejaron en claro que para ellos la única alternativa financiera para la entidad es la de empeñar su futuro, nunca se debatió sobre transparentar el uso de recursos públicos, sobre rediseñar el presupuesto para hacerlo más austero y eficiente. Se usó al Congreso como oficialía de partes y se atropelló su soberanía nuevamente. Esa es la visión retrógrada que representa la derecha en sus diversas versiones, frente a la nuestra, que pretende dejar atrás estos vicios».
En el boletín, suscrito por los morenistas Teresa López Hernández, Mayela Salas Sáenz, Fermín Bernabé Bahena, Laura Granados Beltrán, Francisco Cedillo de Jesús y Sergio Báez Torres, los diputados se dijeron extrañados del comportamiento de los legisladores del PT que decidieron no dar la batalla en contra del endeudamiento o de plano sumarse a esa decisión. «Hemos construido juntos la posibilidad del cambio de régimen, nos han acompañado como aliados en muchas batallas y hoy, de forma inexplicable, asumen esta postura. Ellos tendrán que explicarle a sus electores, a los que ofrecieron durante la campaña una plataforma política contraria al endeudamiento»
Las y los parlamentarios dijero finalmente que los números que presenta el gobierno no cuadran. «Pidieron más deuda so pretexto de un ‘recorte de las transferencias federales’ pero tal recorte no existe; se trata de un rediseño del presupuesto que redirige los recursos directamente a los beneficiarios y que reasigna economías a partidas y ya no a otros mecanismos como los fideicomisos que eran poco transparentes. Lo que se quería era justificar un empréstito que el gobierno ya está ejerciendo y que no vemos reflejado en ningún lado; ni en obras, ni en programas», concluye el comunicado.