En México es de alta gravedad los ataques que la ciencia ha venido sufriendo por parte del gobierno federal, primero a través de severos recortes presupuestales, y ahora mediante la persecución de investigadores, alertó el diputado Víctor Manuel Manríquez González, coordinador del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática en la LXXV Legislatura del Congreso del Estado.
El legislador refirió que el riesgo para la libertad de pensamiento es una realidad en el México de la llamada Cuarta Transformación, la cual ha mostrado su rostro más oscuro y dictatorial con la comunidad científica del país.
“La persecución emprendida contra 31 científicos ampliamente reconocidos, y a los que se les ha denostado abiertamente desde el púlpito de las conferencias de prensa matutinas del presidente Andrés Manuel López Obrador, es la expresión más clara y descarnada, por una apuesta real al oscurantismo por parte de la llamada 4T”.
Condenó que la tendencia federal sea la persecución del conocimiento, “durante la pandemia nuestra comunidad científica ha dado muestras de verdadero esfuerzo para buscar soluciones, respuestas, pese a los raquíticos presupuestos, y ¿cuál es la respuesta que se le da?, pues la persecución”.
Recordó que la Ley de Ciencia y Tecnología establece que deberá destinarse al menos el 1 % del Producto Interno Bruto a la investigación científica y al desarrollo tecnológico, pese a ello la federación sólo destina el 0.38%.
“El rezago en la materia es notable, si tomamos en cuenta que el promedio de inversión que realizan los países que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), es del 2.4%”.
Víctor Manríquez apuntó que la postura de la 4T en torno al conocimiento, la investigación y el libre pensamiento, escribe una de las páginas más lamentables de persecución y acoso para la ciencia en México.
“Atentar contra el saber no es inocente, su ánimo es una polución perversa por acallar toda forma de pensamiento crítico, que funde formas diferentes de asumir el mundo, no hay que olvidar que fomentar la ignorancia pretende el manejo de éstas para fines diametralmente opuestos al interés público”, recalcó.