¿Qué tan consciente somos de nuestros lenguajes paraverbal y no verbal?, ¿los sabemos explotar?
Los gestos y movimientos que hacemos con el cuerpo y la manera en la que usamos nuestra voz, son herramientas muy poderosas para comunicar y persuadir. Sin embargo, no hemos desarrollado estas herramientas porque nadie nos ha mostrado su efectividad.
El político, el empresario, el comerciante, el comunicador, el docente o quien sea, todo el tiempo está tratando de convencer a un interlocutor sobre algo que le interesa, para que este interlocutor modifique su conducta.
Un político busca votos y todo el tiempo está tratando de vender sus ideas políticas, un empresario o un comerciante todo el tiempo está haciendo negocios y tratando de colocar sus bienes, productos o servicios, un docente siempre está tratando de enseñar sus lecciones y trabajando para convencer a sus alumnos de los temas impartidos. En realidad, todos buscamos persuadir (convencer) porque tenemos intereses.
Y desde luego, hay maneras más efectivas de persuadir. No todo es a través de palabras y discursos bien articulados. El mirroring es la forma en la que podemos utilizar el cuerpo, la mirada, la respiración, la voz, los gestos y más, para persuadir a nuestros interlocutores.
De lo que se trata es de conectar y ser más empático con el cliente potencial y para eso se utiliza la técnica del mirroring partiendo de una base: “los consumidores son más proclives a empatizar y aceptar a personas que en su opinión tienen intereses y creencias similares a los suyos”.
Con el mirroring lo que haremos es reproducir la comunicación verbal y no verbal de nuestro interlocutor, con el fin de crear una relación de sintonía y empatía con él. Pero hay que tener mucho cuidado, porque algunos piensan que es estar frente al otro e imitar sus gestos o su lenguaje verbal; por ejemplo: si se sienta, me siento, si cruza los brazos, cruzo mis brazos. Esto no es correcto.
Es verdad, se trata de posicionarte frente al otro y duplicar lo que hace, pero hacerlo de manera fluida, porque duplicar no es imitar, tan solo será encontrar puntos de contacto para que el cliente potencial se sienta a gusto, conecte con nosotros y entonces podamos deslizar de manera inconsciente nuestro mensaje de venta.
*El autor es consultor, tiene estudios de doctorado en Política, de maestría en Comunicación, de maestría en Neuromarketing, de maestría en Ciencia Política y de licenciatura en Derecho / WhatsApp 4433181742.